viernes, 20 de enero de 2023

Reseña: Inu-Oh.

Con el paso de los años dos cosas que se han ganado mi interés son las experiencias que no temen ser experimentales y los musicales extravagantes, por lo que la propuesta de ver hace unos días atrás en la gran pantalla el ultimo filme de un director tan conocido por su animación alternativa como lo es Masaaki Yuasa, fue algo que no me podía perder. Yendo sin expectativas claras sobre que tendría en frente mas haya de ser un musical y dispuesto a todo lo que fuera a ofrecer, encontré una historia sobre los incomprendidos, los ignorados y los olvidados que gritaban a todo pulmón "aquí estamos" en una contrastante puesta en escena. Bailando entre la fantasía y la realidad en una reimaginación del siglo 14 tras la caída del clan Heike, esta es la inventada historia detrás del nombre detrás del titulo del mejor actor de teatro Noh en su tiempo. Convirtiendo así la olvidada vida del rey de los perros en una opera rock en donde vive aun si por un instante para ser el absoluto rockstar de su generación.

Inu-Oh o estilizado en mayúsculas como INU-OH, es un filme musical animado de 98 minutos producido por parte del estudio Science SARU, sirviendo como el ultimo trabajo del aclamado director Masaaki Yuasa tras retirarse del puesto de presidente en 2020 tras co-fundarlo por eso del 2013, aunque este es mas un periodo de descanso que un retiro formal de la industria hasta nuevas noticias. Estrenando el medio del festival de cine internacional de Venecia durante 2011 y con algunos retrasos en su estreno en Japón llevándola a cines en 2022 esta película gano varios premios en festivales internacionales e incluso llego a ser nominada al globo de oro. Siendo esta una adaptación algo libre de la novela Tales of the Heike: Inu-Oh del escritor Hideo Furukawa, cuya traducción del Heike Monogatari se uso para el anime que este mismo estudio produjo bajo Naoko Yamada, la producción de esta obra conto con el trabajo de la guionista Akiko Nogi, el diseño original de personajes corrió por parte del mangaka Taiyo Matsumoto autor de Ping Pong el cual Yuasa en su momento llevo a The Animation, siendo asistido en este rol por el animador Nobutake Ito, por otra parte la banda sonora fue el rol del musico experimental y compositor Yoshihide Otomo, quien fue acompañado por Avu Chan el vocalista de la banda QUEEN BEE y el actor Mirai Moriyama dando sus voces a los diferentes números presentes en este musical. Sin olvidarnos la supervisión histórica de Yoshihiko Sata, la supervisión instrumental de Biwa por parte de Yukihiro Gotō y la supervisión de teatro Nogaku Keizo Miyamoto, a cargo de mantener el aspecto mas folclórico de esta obra que mezcla influencias pasadas y futuras.

La sinopsis de esta película es la siguiente: En la inestabilidad del periodo Muromachi en donde el nuevo shogunato intentaba borrar toda historia que contradijera su gloria o recordara la de sus antecesores, esta es la historia del instante de fama de un practicante del teatro Noh del que el tiempo olvido todo excepto su nombre como el rey de los perror, Inu-Oh. Iniciando con el encuentro entre un musico que quedo ciego durante su infancia tras presenciar uno de los tesoros imperiales perdidos y un bailarín deforme por una maldición que lo a llevado a ser tratado como una bestia desde su nacimiento, esta es su búsqueda por ser reconocidos como individuos por el mundo mediante sus talentos y expresiones personales, todo al mismo tiempo que sus destinos guiados por los fantasmas del Heike les invita a contar las historias olvidadas de estos guerreros para permitirle a los espíritus encontrar paz mientras el par de artistas usan estos relatos para crear espectáculos como sus contemporáneos jamás han visto.

Usando como base una figura folclórica del que solo se sabe tenia el nombre artístico de Inu-Oh y fue considerado por muchos el mejor en su arte si de verdad llego a existir, esta película nos lleva a las mas disparatas de las suposiciones, absurdos rumores y leyendas urbanas sobre su origen para invitarnos a un surreal viaje en donde como ya dije antes, los incomprendidos, los ignorados y los olvidados gritaban a todo pulmón "aquí estamos, nosotros existimos" en una experiencia que lleva de la manera mas literal la idea de que los practicantes de Noh eran las estrellas del rock de su tiempo. Con un inicio que se toma un tercio de su duración para presentarnos un arco mas tradicional aun con el presente misticismo y realismo mágico que Yuasa y compañía le pueden dar, tenemos un tiempo para comprender de donde vienen sus protagonistas hasta que tras un primer encuentro deciden alejarse del lugar que el mundo les a dado con tal de crear sus propios nombres en la historia. En medio de un conflicto entre el arte libre y lo que es aceptado o negado por aquellos con poder, Inu-Oh y su amigo el musico Tomona transgreden lo cotidiano y lo esperado de ellos con tal de demostrar sus individualidades en una serie de números musicales que demuestran como el arte existe para ser autoexpresión. Siendo un sencillo drama histórico cuyos momentos políticos no son el fuerte ni el interés de la narración, esta obra ofrece un satisfactorio relato que en sus anacrónicos excesos e indulgencias da un contexto mucho mas potente a sus ideas sobre el buscar la expresión propia mientras invita a pensar en todo lo único y diferente que se a creado y perdido por no ser preservado del inescapable paso del tiempo.

En una mezcla de estilos y medios usual para las surreales sensibilidades de los trabajos dirigidos o influenciados por Yuasa, nos encontramos con un anacrónico espectaculo que no duda de tomar las pinceladas mas clásicas de pinturas y cuadros con elementos de producción digital para ofrecer algo como pocas veces se ve en el lado mas uniforme de la industria. Impredecible y variando según las intenciones del momento, pasamos de un estilizadamente crudo pero emocionalmente humano diseño de sus personajes, bruscas pinceladas representando como ve el mundo un ciego, primeros planos de un mundo visto mediante los huecos de una mascara, escenarios con efectos especiales impensados para el periodo histórico, además de ciertos elementos y secuencias que se repiten como un eco a lo largo de toda la historia, sin olvidar las constantes secuencias de baile que van de lo mas tradicional que uno esperaría de un drama clásico a lo mas actual sin cuestionar el porque de sus caprichos de teatralidad musical. Complementando lo único del aspecto visual la banda sonora de Yoshihide Otomo también danza entre lo clásico y lo moderno, ofreciendo una instrumentalización que mezcla instrumentos de cuerda, viento, percusión y vocales de antaño con elementos eléctricos que dan pie al centro de toda la experiencia, los números musicales de opera rock que representan la absoluta libertad del dúo protagonico al cantar las historias de fantasmas a los que con sus voces dan paz mientras enloquecen a los vivos con sus presentaciones. Si bien rock puede no ser lo mas esperado para representar a una figura asociada al mundo mas tradicional como es el arte del teatro Noh, no deja de ser una idea brillante cuando pensamos que ninguna de sus piezas reales a sobrevivido al día de hoy por lo que sea como fuera su arte es irrealizable hoy en día, siendo esto mas un sucesor espiritual a la clase de impacto que debió tener para que su leyenda al menos sobreviviera como el nombre del mejor exponente de su disciplina para el periodo en que vivió de haber existido.

Inu-Oh a sido una experiencia que honestamente me a costado poner en palabras por que es de esas obras que mas vale experimentarlas por uno mismo y sacar sus propias conclusiones de lo que has visto. Lo que si puedo decir es que ya sea el ultimo trabajo de Masaaki Yuasa dentro del estudio Science SARU o si es el ultimo proyecto de su carrera en la animación, esta es una despedida a la que personalmente le daría una ovación por como mantiene la cabeza en alto junto a los mejores trabajos de este peculiar director y artista. Si bien con sus limitadas funciones es difícil que puedan verla en la gran pantalla si llegan a perderse la oportunidad, esta es una película que recomiendo ver a todos los que disfruten de la animación y los musicales, aunque de tener la oportunidad de verla en otra forma les sugiero usar audífonos para la mejor inmersión posible en su música aun si no se que tanto se sostenga el impacto de su espectaculo en las pantallas mas pequeñas.

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