Una de las principales razones por las que me gusta ver anime es por como ofrece algunas de las mas absurdas sorpresas que se permiten crear, sean condenadas la lógica y el realismo, dando así experiencias difíciles de olvidar. Jugando con el contraste entre algo que consideramos inocente con una algo que desde el primer trailer parecia fuera de lugar, solo basto con ver el primer episodio para que esta obra original demostrara sus verdaderos colores en algo que dejo sin palabras a mas de uno. Sin embargo ahora que el humo de los cañones se desvanece y el ruido de los tiros a pasado solo dejando los saludos de “Okaerinasaimase, Goshujinsama!”, tomándose demasiado en serio o no tomándose lo suficiente en serio según el absurdo del momento, me toca escribir de la serie mas violenta, sangrienta y graciosa que a producido P. A. Work desde Another hace una década ya, siendo esta una entrada dedicada a una de las mas curiosas comedias del año pasado.
Akiba Maid War también llamada ocasionalmente como Akiba Meido Sensō, es la mas reciente serie original por colaboración entre el estudio de animación P. A. Works y la desarrolladora Cygames siguiendo pasos a proyectos como su sorprendentemente popular Uma Musume, manteniendo su absurda mezcla de ideas y géneros siendo esta ocasión el turno de clásicos dramas criminales con las estéticas del moe. Con un total de 12 episodios que se transmitieron entre octubre y diciembre del pasado 2022, esta obra fue dirigida por Sōichi Masui contando con el apoyo de Yoshihiro Hiki supervisando la composición mientras trabajaba junto a los guiones escritos por Katsurō Hidaka, Saji Komori y Yoko Yonaiyama. Si bien Kohei Honda dirige el arte de la serie, es el animador Manabu Nii quien marca mas identidad al encargarse del diseño de los personajes al mismo tiempo que supervisa en su rol de director en jefe de animación. Mientras tanto la banda sonora es trabajo del compositor y bajista Yoshihiro Ike quien tiene una carrera dando música a mas de 100 títulos en sus dos décadas de trayectoria entre películas, dramas, videojuegos y anime.
La sinopsis de esta serie es la siguiente: El año es 1999 y en Akihabara, la meca de la cultura otaku una idealista Nagomi Wahira se prepara para su primer trabajo formal. Si bien a la luz del día parece una colorida zona repleta de locales que apuntan a todos los posibles nichos con sus característicos y abundantes cafés de sirvientas, los adornos coloridos y manierismos adorables ocultan la verdad de que el rojo en sus delantales es en mas de un caso la sangre de una rival en lugar de una mancha del kétchup usado en el omelette. Con su idealismo siendo enfrentado de golpe con una despiadada industria, Nagomi empezara a servir como una sirvienta en uno de los locales mas pequeños de la zona sin saber que sus actos, encuentros y ambiciones podrían cambiar para siempre la tenue paz que existe entre los "adorables" gremios criminales que intentan dominar estas calles para imponer sus propias reglas.
Si hay una palabra para describir la experiencia que es Akiba Maid War es contraste. Ya en mas palabras, es el humor, la incomodidad y el impacto que nace cuando mezclamos dos cosas que consideramos opuestas a primera vista. Siendo los cafés de sirvientas un concepto ya casi inseparable del anime/manga con todas sus ideas de juventud, inocencia y delicadeza que llevan proliferando desde el auge del moe por eso del 2000, es fácil que todo fan de la animación del pais del sol naciente comparta ciertas preconcepciones cuando una obra decide tratar sobre esta industria, sin embargo con gruesas pinceladas de clásicos del drama criminal de todo tipo, desde el cine de gánster a yakuzas, las chicas de esta historia nos presentan moe incluso estando en la treintena, hastiadas y dispuestas a usar violencia para enfrentar violencia. Entre guerras por el territorio para los diferentes cafés, intentos de asesinatos, apuestas ilegales y los intentos de nuestras protagonistas por sobrevivir, vemos bajo un filtro moe el cruel ciclo de venganza y traiciones que va moldeando una ciudad que no parece coincidir en un inicio con los ideales de Nagomi de hacer el moe moe kyun, no la guerra, tratando de que muera o se vuelva otra cínica portadora del delantal y orejas decorativas. Con un humor que nace de lo serio que se toman todos sus eventos aun cuando solo son sirvientas vendiendo almuerzos a sobreprecio, esta es una serie que no para en ningún momento llevando cada una de sus situaciones hasta las mas absurdas de las consecuencias. Lamentablemente el que no se tome pausas es un arma de doble filo que si bien apoya a su humor, quizás haga que algunos momentos se sientan cortados abruptamente, pero con la cantidad de referentes que desea emular logra contar una historia bastante completa.
Manteniéndonos con la idea del contraste entre sus elementos, nos encontramos con las coloridas fachadas de una tierra de sueños y esperanzas, con la mas tosca y hasta sucia realidad de un mundo en donde todos parecen tomar por sentado que es matar o morir, llevando a una anacrónica amalgama de elementos que de alguna manera crea un absurdo retrato del drama criminal. Logrando tener bastante impacto al saber usar sus coreografías de combate ya sean breves y brutales, o simplemente exagerado por humor, esta serie visualmente mantiene un nivel de producción que si bien no perfecto es mas que efectivo. Si bien puede decirse que peca de no subir las apuestas con el espectaculo tras el primer episodio, no podemos decir que decaiga, especialmente con los múltiples pequeños detalles que tiene en su interior. Por su parte la banda sonora de la serie es servicial usando su instrumentalización para apoyar o contrastar segun sea la seriedad o humor del momento, todo acompañado de un buen trabajo de voces y efectos de sonido a lo largo de los episodios. Aunque si hay algo que puede robarse el show sin problemas bien vienen siendo las insert song como The Pure Maid's Master-Killing Kiss que son cosas que tienen que ver y oir por si mismos. En lo que respecta a los opening y ending de la serie nos encontramos con una curiosa selección de temas interpretados por la unidad de seiyuus de la serie bajo el nombre de Ton Tokoton staff, mientras el tema de entrada es "Maid Daikaiten" que con sus ritmos de rave noventero y jpop del 2000 nos prepara para la mezcla de géneros del show, mientras cual película de yakuzas el ending es "Maid no Komoriuta" que a ritmo de un tradicional Enka nos habla sobre el camino y honor de vivir como sirvientas.
Akiba Maid War no es una de esas series que veo como el inicio de una enorme franquicia multimedia repleta de secuelas e historias paralelas, pero no necesita serlo. Akiba Maid War me parece mas una historia contenida por si misma y que se deja disfrutar como es, aun si una pequeña parte de mi hubiera disfrutado de ver mucho mas de los elementos que toma de dramas criminales, historias de venganza y todo clásico del cine de yakuzas, para llevar su historia un poco mas lejos. Si bien considero que como una comedia negra ya merece como mínimo algo de su interés, si tuviera que obligarlos a ver solo un episodio de una serie en particular dentro de todo el catalogo de cosas que estrenaron durante 2022, mi selección seria el primer episodio de esta serie que de seguro no los deja indiferentes. Caótica, exagerada, violenta y sorprendentemente idealista, la historia de estas sirvientas es una que disfrute.
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