Reseña: Princess Tutu.

De la misma forma que existen diferentes tipos de historias para cubrir una enorme variedad de temas, existen diferentes tipos de héroes para cada una de ellas pasando desde seres con increíbles poderes, personas normales que actúan en el momento de necesidad e incluso a seres pequeños que logran hacer mas de lo que su papel indicaba aun si no dejan de ser lo eran a simple vista. Siguiendo esta idea y aprovechando la oportunidad para participar en "Héroes Delta" la mas reciente iniciativa de Zona Delta, decidí por fin quitar de mi lista de pendientes una serie con un estatus de culto que cumple al pie de la letra con esta idea de demostrar ser algo mucho mas grande de lo que parece a simple vista aun si al mismo tiempo es lo que puedes ver, que entre su adorable estética y un cursi titulo, Princess Tutu ofrece una obra con mucho valor y corazón.

Princess Tutu es un anime original de chicas mágicas inspirado en obras de ballet y cuentos de hadas,  Siendo creada por Ikuko Itoh para el estudio Hal Film Maker. Con un total de 26 episodios que originalmente fueron transmitidos como dos temporadas de 13 episodios cada una durante los años 2002 y 2003 bajo los subtitulos de "Kapitel des Eies" (capitulo del huevo) y "Kapitel des Eies" (capitulo del polluelo), sin olvidar que posteriormente al anime y de manos de Mizuo Shinonome llego a ser adaptado a un manga de dos volúmenes aunque no sea una adaptación exacta de lo visto en la serie. Ya volviendo al tema del anime, la serie fue dirigida por Junichi Sato y Shogo Koumoto. Contando con el guión escrito por Michiko Yokote junto a los storyboard de Yuu Kou, diseño de personajes de la creadora de la serie Ikuko Itoh y la banda sonora compuesta o seleccionada por Kaoru Wada.

La sinopsis es la siguiente: Hace mucho tiempo, había un excéntrico escritor llamado Drosselmeyer que murió antes de finalizar una de sus historias. En ella, un apuesto príncipe luchaba contra un cuervo monstruoso. Con la muerte del escritor no parecía tener fin hasta que un día el cuervo logró salir de la historia para adentrarse en el mundo real y desatar sus poderes en todo aquel que se le cruzara, el príncipe le siguió y para lograr sellarlo tuvo que romper en pedazos su corazón... El tiempo paso y la historia sin final no avanzo mucho mas, pero un pato que deseaba ver al príncipe volver a sonreír recibe del fantasma de Drosselmeyer el misterioso poder de transformarse en el personaje de la princesa Tutu para así cumplir con el rol de recuperar los fragmentos del príncipe y liberarlo. Sin embargo aun con este poder no todo le sera fácil a la pequeña patita, ya que nadie salvo el mismo autor sabe cual es la clase de final que les espera de llevar esta historia hasta su determinado final.

Mezclando múltiples elementos del ballet clásico y los cuentos de hadas junto a un poco de lo que hace a los show de chicas mágicas, Princess Tutu es una serie infantil en toda regla sin embargo no debe ser menospreciada por esto y los prejuicios que se le suelen dar a esta clase de obras por como actualmente el ballet y los cuentos de hadas son vistos como algo dulce. Que aunque inocente esta serie se presenta sin miedo a tocar temas oscuros tal cuento de lo hermanos Grimm o la obsesión con los finales trágicos en el ballet mas clásico, sin embargo como trato de decir no es una serie simplista que se vaya por un solo lado de la balanza. Equilibrando con una increíble naturalidad inocente comedia con oscuro drama, tenemos una historia de romance cuyo principal tema es la lucha en contra destino y el aceptar lo que uno realmente es en lugar de aceptar lo que otros intentan que seamos, todo mientras nos sumerge en una surreal visión sobre la tragedia y la meta-ficción.
Presentándonos las aventuras de Ahiru (no es un real nombre, si no que literalmente es la palabra japonesa para pato) una pequeña pato a la que se le a dado el rol de la bailarina princesa Tutu para poder por fin dar un final a la historia del príncipe y el cuervo, aun si este llena de dudas sobre si lo que hace es lo correcto o si un simple pato como ella realmente puede cumplir con la tarea que le a tocado llevando así a un relato que se centra mas en como sus personajes se desarrollan a lo largo de cada episodio al punto de rebelarse en contra del trágico rol que Drosselmeyer les intenta forzar, llevando a que el personaje mas pequeño de todos sea quien logre influenciar para bien o para mal el futuro de la historia. Sin embargo aunque me he referido bastante a esta serie en una muy buena luz, debo advertir que es una serie bastante lenta y en un inicio la formula episodica puede hacer que la gente pierda el interés, pero en mi experiencia personal una vez Princess Tutu toma ritmo esta no se detiene hasta el mismísimo final.

En lo que respecta al apartado visual, Princess Tutu es una serie que claramente a envejecido en los mas de 15 años que han pasado desde su estreno pero aun conserva su particular encanto. Para todas las limitaciones de su época, estamos ante un trabajo consistente con su estética entre el shojo y el cuento de hadas que logra capturar la esencia expresiva del baile aun si debe recurrir al stock footage y algunos planos fijos para suplir su limitada animación. Sin embargo lo que no se puede lograr solo con el movimiento de los personajes, se nos presenta con una imaginería visual que toma la teatralidad del ballet junto a los aspectos fantásticos de los cuentos para dar vida a un show bastante único que junto a su envejecida animación logran capturar la apariencia de algo surreal, elegantemente clásico y bastante atemporal, aun si quizás no sea particularmente llamativa para todas las personas.

Si hay algo que destaca particularmente dentro del apartado técnico de esta serie, esta es la cuidada banda sonora. Con una serie tan influenciada por los clásicos del ballet como el lago de los cisnes o el cascanueces no podía hacer otra cosa que no fuera recoger muchas piezas de música clásica y re-interpretarlas para que formaran los pilares centrales sobre lo cual se construyen las diversas escenas a lo largo de la serie. Desde el "Arabesque", el "Waltz of the Flowers", "Dance of the Sugar Plum Fairy", hasta la mezcla de "March of the Hours" y "Miniature Overture" son algunos ejemplos de los temas que hacen acto de presencia a lo largo de la serie para dar vida a un espectaculo totalmente diferente a lo que se acostumbra ver en el anime. Por su parte el tema de entrada es "Morning Grace" mientras el ending es "Watashi No Ai Wa Chiisaikeredo" ambos interpretados por la cantante Ritsuko Okazaki, la cual captura tanto el sentimiento de optimismo como el de melancolía que transcurre a lo largo de la serie, siendo unas piezas ideales para mentalizar a la audiencia en el tono de la serie que están viendo.

Princess Tutu es una serie infantil y no busca ser mucho mas allá de eso, pero al mismo tiempo es un trabajo con tal cuidado en su producción e historia que termina siendo un ejemplo de lo que cualquier serie debería apuntar a lograr. No es una deconstrucción de las chicas mágicas o de los cuentos de hadas, simplemente es una serie de chicas mágicas que pese a cualquier detalle menor esta bien ejecutada logrando dejar un gran recuerdo con su infantil, surreal y dramática puesta en escena que logra capturar la emotividad de ver una obra de teatro. Aunque no es para todos los gustos, entiendo el por que esta serie recibe el trato culto que tiene. Adorable pero oscura, elegante y sin mayor violencia gráfica pese a los temas que  toca, esta es una serie que por lo menor recomiendo den una oportunidad para ver si les gusta.