Llegando al final de mi visionado de lo que es la primera generación de la enorme franquicia para todas las edades que es Pretty Cure, toca el momento de que escriba acerca de la segunda y ultima de las películas que obtuvo su segunda temporada, Max Heart a lo largo de su transmisión. Sintiéndose todavía como poco mas que un episodio de larga duración con todo lo que eso puede implicar, termino mi visionado con algo que para bien o para mal intenta algunas cosas interesantes que incluso si no se llegan a ejecutar perfectamente, ofreció algunas interesantes posibilidades para que subsiguientes iteraciones de PreCure intentaran explorar dentro de lo que tengo entendido, manteniendo así su estado como los simples pero efectivos cimientos de lo que seria esta enorme franquicia.
Bajo los subtitulos de Friends of the Snow-Laden Sky, Yukizora no Tomodachi o Amici per sempre, dependiendo de la localización, esta cinta de 70 minutos de duración producida por el estudio Toei es la segunda película dentro del trabajo original de Futari wa Pretty Cure Max Heart acreditado al seudónimo de Izumi Todo, la cual llego a salas de cines en diciembre de 2005 coincidiendo con los episodios finales de esa temporada. Ayudando a cimentar que posteriores trabajos en esta franquicia tuvieran al menos una película asociada, esta obra fue dirigida una vez mas por Shimizu Junji, contando en esta ocasión con un guion escrito por Narita Yoshimi, mientras el diseño de personajes es trabajo de Inagami Akira y Tamegai Katsumi, dirección de animación de Tamegai Katsumi, dirección artística de Yuki Shinzo, sin olvidar la infaltable participación de Naoki Satō como compositor musical.
La sinopsis de esta película es la siguiente: Nagisa, Honoka e Hikari se encuentran en medio de un viaje por alguna razón en las montañas nevadas, disfrutando de actividades en la nieve junto a algunas de sus amigas y conocidos. Mientras tanto en los cielos, representantes del jardín de las nubes viajaban para visitar a la reina de la luz pero accidentalmente soltaron el mágico huevo de Houhou que llevaban consigo, dejando que este cayera en algún punto del jardín de los arcoíris, la tierra. Sin embargo recuperar ese huevo que a caído entre la nieve y permitirle llegar a su forma definitiva no va a ser un trabajo fácil para las heroicas Pretty Cure, que mas haya del clima, las fuerzas oscuras de los espíritus Freezen y Frozen pondrán a prueba sus determinaciones, amistad y trabajo en equipo en la batalla.
En un escenario nuevo, pero no especialmente lejano a las usuales aventuras de nuestras heroínas, nos encontramos con una historia sencilla que intenta colocar un breve giro dramático, aun si no afecta demasiado al desarrollo del anime. Aprovechándose de lo integrada que esta Max Heart con el poder de la amistad, esta película no solo nos ofrece un dúo de villanos que usan cooperación para contrarrestar a sus oponentes, si no que juega con los mal entendidos y altibajos que incluso las mejores amigas pueden vivir como para entrar en conflicto, en uno de los únicos momentos en casi 20 años en donde PreCures luchan entre ellas por lo que tengo entendido. Para lo que intenta, funciona con todo lo de enfrentar verdadera amistad pese a los problemas que surjan contra la supuesta amistad por utilidad, pero no podemos pedirle demasiada profundidad o dramatismo en lo que hace, especialmente cuando estos mal entendidos entre amigas ya los habíamos visto iniciar, desarrollar y solucionarse de mejor manera en el anime como para que esto no sea mas que una repetición en donde las cosas se van a las manos, pero al final del día se recupera la normalidad a la que estamos acostumbrados. Sera poco mas que el equivalente de un episodio algo inspirado con todo lo que eso implica, pero no a sido algo aburrido que presenciar.
Similarmente a la primera película de PreCure, podemos notar unos colores mas brillantes y un poco mas de detalle puesto en el adaptarse a las especificaciones de un formato diferente a la tv, adornando un espectaculo que aun si reutiliza lo que puede del show original como la secuencia del opening o la de transformación, bien se permite pulirlas un poco mas para no dejar inconforme a nadie. Si nada maravillo, ni nada criticable, el trabajo mas notable en mi opinión vienen a ser los escenarios que pasan de belleza nevada a opresivas expansiones heladas según requiera el momento mientras juegan con sus luces, ángulos y demás elementos para dar vidas a las peleas de estas chicas tratando de rescatar al Houhou. En lo que respecta a la música que conforma la banda sonora para esta película no tengo mucho que decir, que una vez en manos de Naoki Sato, nos encontramos con las melodías que ya asociamos a Pretty Cure junto a nuevas piezas que no se encuentran fuera de lugar con el resto de sus trabajos, con cosas como The time for the Awakening destacando en lo emocional que pueden resultar. El ending es el tema "Gag 100kaibun Aishitekudasai" del antiguo grupo femenino de j-pop/idols Berryz Koubou.
Con todo y sus altibajos, tengo que decir que de las dos películas de Max Heart esta es sin dudas mi favorita. No será tan consistente como la primera, pero sus momentos altos le permiten ser recordada pese a sus momentos mas bajos. Por lo demás, una recomendación obligada para cualquier persona que haya disfrutado de Futari wa Pretty Cure, aun si no les recomiendo ir a verla con grandes expectativas que como todo lo que tiene que ver con la primera generación es una buena ejecución de las ideas básicas de un mahou shoujo sin mucho mas, aunque lo entretenida que puede ser no se lo quita nadie. Por mi parte, me tomare un par de meses viendo otras cosas antes de saltar a la segunda generación de esta enorme franquicia que sigue creciendo cada semana que pasa.
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