miércoles, 25 de marzo de 2020

Reseña: Eizouken ni wa Te wo Dasu na!.


Continuando con las entradas por el final de la temporada de invierno 2020 en la industria del anime y continuando con la cuarentena, tenemos una de las series más artísticas en lo que va del año y viendo que nos depare el futuro, tendrá probablemente un lugar importante entre mis series favoritas que se estrenaron. Siendo el más reciente trabajo de Masaaki Yuasa con la dirección de series después de haber trabajado en la cinta Ride Your Wave (2019) y la muy hablada adaptación Devilman Crybaby (2018). la serie a la que le dedico esta entrada viene a demostrar sus dotes como narrador visual en una idealista historia sobre pasión creativa, trabajo en equipo y los motivos por los que las personas aman crear algo.


Eizouken ni wa Te wo Dasu na! o también llamada Keep Your Hands Off Eizouken! es una adaptación animada del manga homónimo (2016 y todavía en publicación, más una futura adaptación a Live Action que se estrena en mayo de este año) escrito e ilustrado por el mangaka Sumito Ōwara, siendo producida por el estudio Science SARU para un total de 12 episodios que se transmitieron entre enero y marzo de 2020. Dirigida por el reconocido Masaaki Yuasa, contando con la asistencia de Mari Motohashi y Fūga Yamashiro. El guión también perteneció al trabajo de Yuasa junto a Yūichirō Kido. Mientras el diseño de personajes pertenece a Naoyuki Asano y la banda sonora fue compuesta por Oorutaichi.


La sinopsis de esta serie es la siguiente: Midori Asakusa es una estudiante de primero de instituto/preparatoria que adora el anime. Aunque se pasa los días dibujando todas las ideas que tiene, todavía no ha dado el primer paso para crear uno de sus amados animes, y es que sabe que es un objetivo imposible si está ella sola. La primera en descubrir el talento de Asakusa es Sayaka Kanamori, una chica que aunque no tiene mucho interes artistico demuestra un agudo sentido de los negocios con los que aspira a ser productora. No tardan mucho en descubrir que una compañera de su clase, la carismática modelo Tsubame Mizusaki, en realidad tiene alma de animadora, así que juntas crean un club de animación con el cual alcanzar sus sueños de crear algo.


La historia que encontramos en Eizouken es un simple relato de pasión e imaginación en pos de crear algo. Con un grupo de personajes de personalidades diferentes unidas en la meta común de crear, esta es una sencilla obra que nos habla de la pasión creativa y problemas de producción que se pueden encontrar en el camino, todo en un ambiente bastante idealizado y moldeado por el poder de imaginación. En cierto sentido se le puede comparar a otras series como Shirobako, en que hace un comentario en cómo funcionan las producciones de anime, aunque en este caso en una escala mucho más pequeña y no tan técnica, idealizando más su propuesta en el mundo de la imaginación. La honesta sencillez de su propuesta es inspiradora a momentos demostrando mucho amor a la industria con referencias y detalles, pero puede tornarse algo repetitiva en su fórmula al punto de aburrir a algunas personas. Sin embargo para aquellos que están interesados en la animación o conecten con la serie, no deja de ser una agradable experiencia.


En lo que respecta al apartado técnico y especialmente el cómo se ve la serie, es en donde está lo realmente interesante. Mezclando las particulares visiones artísticas de Yuasa al adaptar las curiosas visiones artísticas de Sumito Ōwara, estamos ante una serie que por mas que sea un slice of life escolar luce única entre todas las demás series de la temporada de invierno. Desde los típicos diseños de personajes a la caótica arquitectura de los escenarios, todo demuestra personalidad. Sin embargo el mejor y más interesante detalle técnico es el cómo representan el proceso de trabajo y la imaginación de las protagonistas con los cambios de animación, pasando de borradores algo toscos a escenas más estilizadas conforme toman confianza y técnica en lo que hacen, en toda una demostración de creatividad visual.

En lo que se refiere a la banda sonora y como se escucha la serie en general, solo puedo decir que esta bien. El trabajo de las voces para los personajes es perfecto y las acompaña en todo momento. Por su parte la música funciona a la hora de construir la atmósfera adecuada a cada escena. Por su parte el opening es "Easy Breezy" del dúo de rap femenino chelmico, el cual es un energético y pegajoso tema que combinado con sus visuales se a vuelto un favorito a estar entre los mejores openings del año. Por su parte el ending es "Namae no Nai Ao" del misterioso grupo musical enmascarado Kamisama, Boku wa Kizuite shimatta el cual con su ritmo e interpretación destaca.


Al final del día, Eizouken es una curiosa obra que a llamado la atención de la gente y espero logre pasar la prueba del tiempo... o al menos entregar una segunda temporada de sus aventuras. Sin embargo para bien o para mal es un slice of life y como tal comparte las ventajas y desventajas de los mismos. Siendo posible interpretarla como una carta de amor al poder inspirador de la animación, o simplemente como una serie vacía donde no pasa nada, no obstante recomiendo que le den una oportunidad si aun no lo han hecho, que puede ser que se están perdiendo una de las series más imaginativas del año.

4 comentarios:

  1. Este anime es inspirador me gusto mucho como se explicaba mucho sobre la animacion y todas las cosas interesantes detras de la creacion de cada animes, me gustaria ver una continuacion de las aventuras de Midori y haber si vuelve a sentarse xD

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  2. Este anime ha sido de lo mejor del año, es como si fuera el propio Yuasa dentro de un anime... Kanamori la mejor!

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    1. Es fácil una de las series que terminara en los top 10 a fin de año.

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