Reseña: Toriko.

Aunque hoy en día no sea uno de los mangas mas recordados por la cultura popular, o al menos no tan en boca de todos quienes consumen este medio, en los años dorados que fueron los 2000-2010 para los tres grandes shonen, la revista Weekly Shōnen Jump intento por todos los medios el coronar como el cuarto emperador a una simple historia de aventuras en búsqueda de los alimentos definitivos con una extensa -pero no total- adaptación animada, películas, colaboraciones y mucha publicidad, aun si mirando atrás el empuje constante le jugo mas en contra que a favor especialmente por el regular anime. Sin embargo dándome el tiempo para releer este manga simplemente por capricho, lo que recordaba como solo otro shonen mas con una larga duración, resultaba en un homenaje a los clichés de su genero con una que otra idea interesante que hagan de este relato de apetitos apocalípticos y extravagantes abominaciones culinarias una experiencia bastante diferente.

Siendo el tercer trabajo escrito e ilustrado por el mangaka Mitsutoshi Shimabukuro que antes de esto era mas conocido por sus obras de humor, Toriko es un manga shonen de comedia y aventuras que siendo publicado en las paginas de la popular revista Shonen Jump desde mayo de 2008 hasta noviembre de 2016 acumulo un total de 396 capítulos que fueron recopilados en un total de 43 volúmenes impresos tanto en japonés, ingles, portugués y español. Siendo todo un éxito de ventas para la revista al punto de ser comparada -con un decimo lugar- con los grandes de su época, esta obra conto con adaptaciones y colaboraciones varias con otras de los títulos que compartían revista. Desde un par de ovas que lo reunían con One Piece o Dragon Ball Z, un anime de mas de ciento cuarenta episodios animado por Toei Animation bajo la dirección de Akifumi Zako que cubre casi dos tercios de la historia aun si decide reducir el tono de la violencia y horror para intentar alcanzar a un publico mas amplio con debatibles resultados. Tuvo algunas producciones que llegaron a salas de cine, desde una cinta de media hora por parte de Ufotable, como un par de películas por Toei. Todo sin contar el trio libros relacionados y los videojuegos en donde aparece como una colaboración.

La sinopsis de esta obra es la siguiente: En un tiempo conocido como la era gourmet la tierra esta repleta de alimentos como ningún otro, con sabores que parecen salidos de otro mundo. Toriko es un cazador gourmet quien trabajando en la búsqueda y captura de ingredientes sueña con encontrar con aquellos manjares que satisfagan su apetito y puedan formar parte de su cena de curso completo. Enfrentando para esto animales, plantas e incluso los terrenos y climas mas hostiles, la lucha entre comer o ser comido es el camino que sigue. Siendo acompañado por el débil pero hábil chef Komatsu, sus viajes los llevaran a todos los rincones del mundo, todo en rumbo de un destino que los llevara a enfrentar hasta el mas grande y legendario de todos los ingredientes conocidos por la humanidad tras haber detenido una terrible guerra mundial 500 años atrás, GOD. Aun si el camino hasta esa leyenda no es uno que enfrentaran solos, ya que aliados y rivales desean por probar aquel mítico sabor.

Siendo mayormente una parodia y homenaje a los shonen de la vieja escuela con una simple característica de tratar sobre la caza y recolección de alimentos, la historia de Toriko sigue una formula conocida de amenazas cada vez mas grandes donde la determinación y amistad se enfrentan contra las fuerzas antagonistas, en un festival de clichés y ridículos siempre crecientes en los viajes de sus hiper musculares protagonistas, sin mucho lugar para el romance o grandes giros narrativos que el apetito es lo primero. Lo que hace de esta obra una lectura interesante, es que la escalación no se detiene y va hasta sus ultimas consecuencias, por lo que las emociones de enfrentar animales salvajes y un mundo hostil eventualmente terminan dando una vuelta completa para dar en un relato de horror cósmico donde comer y ser comido es la fuerza que mueve el universo y la tierra es solo otro ingrediente en el menú. Esta misma escalación temática es responsable de que las ideas usuales de los shonen sobre amistad, determinación y esperanza, se unan con las ideas de llenar el estomago, para explorar la faceta mas emocional de comer, enfrentando un vacío que todo lo devora sin jamás llenarse contra la satisfacción de compartir aunque sea un pequeño platillo con otros. No es subversivo de sus clichés, incluso conscientemente juega con ellos aun si el resultado es regular como la boda que sale de la nada, pero entre que no teme mostrar lo violento que puede ser su mundo donde mas que importar el bien contra el mal, es una batalla por sobrevivir y comer otro día, esta es una historia idealista que sabe que ofrecer para entretener en algo en donde espiritualidad resulta tan interesante como las constantes batallas que presenciamos de principio a fin a lo largo de sus paginas.

Visualmente es una mezcla de estilos que pese a contrastar constantemente entre normalidad y absurdo, estos logran finalmente dar pie a un mundo de fantasía donde conviven en cierta armonía personajes musculares repletos de testosterona que parecen salidos del Puño de la estrella del norte, personajes mas simples que parecen salidos de un gag cómico, junto a un variedad de bestias que van desde el realismo, al horror e incluso lo que parece salido simplemente del borrador de un niño pequeño, lo cual toma sentido conociendo que muchas de las entidades a lo largo de esta historia fueron sugerencias enviadas por cartas de los fanáticos, las cuales fueron añadidas a las aventuras. Es un reflejo perfecto al caos siempre cambiante que acompaña a las aventuras del cazador Toriko y su amigo el chef Komatsu al rededor de su fantástico y peligroso mundo, iniciando en un territorio que uno podría encontrar en algunos de los shonen mas clásicos antes del cambio de milenio, pero con los años de publicación que acumulo termino por aceptar su extraña naturaleza extravagante para ilustrar cada clase de cosa que era difícil saber que esperar en las paginas por venir. Es un arte bastante "único" por así decirlo que se le toma cariño con el tiempo, pero debo admitir que no es inmediatamente atractivo al publico en general.

No es un shonen perfecto ni mucho menos, tampoco es un manga sin problemas, que el lento inicio que no muestra los verdaderos colores de esta obra hasta bien entrado en el arco de Ice Hell poco ayuda en el interés inicial por su historia de aventuras y el ritmo acelerado del tramo final como si tuviera el tiempo contado para terminar si o si en la revista, son algunos problemas notables. Sin embargo si le damos una oportunidad pese a ello, el esfuerzo inicial es recompensado con una lectura ligera pero interesante, que sin insistir en reinventar la rueda, aprovecha sus virtudes para mantener sorpresas inesperadas en su siempre creciente locura desde sus primeros capítulos hasta la sencilla pero satisfactoria conclusión. Hoy en día, bien sabemos que dignos finales son raros de producir y encontrar. Toriko bien puede ser solo un shonen mas en la enorme lista que existe de ellos, pero al menos en mi opinión es uno que merece ser recordado cada tanto.